Pilar Llanos nace en Ciudad Real, donde estudia en un primer momento la carrera de enfermería. Apenas acabada la carrera, se traslada a Granada en busca de un lugar donde empezar su aprendizaje artístico, en respuesta a sus inquietudes y talento innato. Allí, compatibiliza su trabajo de enfermera con el de estudiante en la facultad de Bellas Artes, a la par que realiza diversos cursos de fotografía y restauración.
Años después, finalizados ya sus estudios, comienza la ardua tarea de hacerse un hueco en el mundo artístico, dentro de los campos de fotografía y pintura.
Realiza varias exposiciones colectivas en ambos ámbitos, y poco a poco va siendo reconocida hasta poder hacer sus primeras exposiciones individuales.
Tras varias exposiciones de fotografía, Pilar Llanos encuentra su autentica pasión en la pintura: una increíble técnica de preparación del soporte, para conseguir un rico mundo de texturas.
Dejando un poco de lado a partir de aquí el mundo de la fotografía, Pilar comienza nuevas series temáticas de pintura, donde prevalecen en sus primeros años la figura del cuerpo humano femenino al desnudo, conviviendo así la delicadeza y finura de los mismos, en contraposición con un sinfín de texturas.
Durante los siguientes años Pilar Llanos continua en esta línea, participando en numerosos certámenes y premios de pintura, exposiciones individuales y colectivas, e incluso donando obras a instituciones benéficas.
Sin embargo, en 1998, la producción artística de Pilar se detiene bruscamente, debido a motivos personales.
Toda la inercia y reconocimiento conseguidos en los últimos años, se ven de esta manera truncados, y con el tiempo apaciguados.
Durante los próximos diez años, Pilar Llanos permanece artísticamente inactiva, hasta que a finales de 2007 empieza de nuevo a pintar, primero de manera individual y asilada, y por fin a mediados de 2008, crea su primera serie completa con más fuerza e ilusión que nunca.
El estilo de pilar podría enmarcarse dentro de la figuración ligeramente expresionista, si bien es cierto que alguna de sus obras habría que catalogarlas como de cercanas a la abstracción.
Posiblemente lo mas significativo de la pintura de pilar llanos sea la inmediatez y la frescura que muestran todas sus composiciones; el trazado mezclado con la arruga subyacente genera sobre el soporte un efecto texturado calido y espontáneo. No obstante, hay que destacar de manera notable la excelente e ingeniosa técnica de preparación o aparejo que usa la artista en todas sus obras.
La formación en pintura y restauración de pilar llanos, es suficientemente extensa en los aspectos matéricos y conservacionales, por lo que hacen que en sus obras se plasmen esos conocimientos aprehendidos, convirtiéndolas así en pequeñas joyas técnico plásticas.